LOST MEJORES CLIFFHANGERS (ÚLTIMA PARTE)

Hoy acabamos con la recopilación de los mejores Cliffhangers empezada hace más de una semana. Agárrense a la silla porque estos son los 6 mejores finales de capítulo para un servidor.

6. Dad? (2). (3×13)

El mejor “Dad?” de los que llevamos hasta ahora. Quién sabe si veremos alguno más. Desde el capítulo 4 de la serie nos hacíamos una pregunta: “¿Cómo llego John Locke a la silla de ruedas?”

La pregunta tenía que ser respondida a su tiempo. Primero tenían que contarnos quién era el malvado padre de John Locke. Y les llevó lo suyo porque es que Anthony Cooper es mal, muuuuy malo. Tan malo como que le dio por matar a un chaval que le estorbaba (él no negó, pero claro, cualquiera le cree) y después tiró a su hijo por la ventana de un octavo piso.

John Locke, para nuestro regocijo, sobrevivió al golpe.

Y al cabo de muchos años (cuatro), Locke acaba hablando con Benjamin Linus sobre un submarino, y Benjamin le habla sobre una caja mágica, y Locke le dice que hace trampas porque tiene artilugios artificiales en la isla y eso no debería ser así, aunque bien que nuestro calvo favorito coge un trozo de pollo del frigorífico, espabilao. Conclusión, que Locke explota el submarino y después le detienen los otros y le pegan un par de golpes (tiene un ojo morado). Y Benjamin Linus le enseña lo que había dentro de la caja de la que hablaba en plan metafórico antes.

¿Y qué encontramos?

Al padre de John Locke.

5. You´re gonna die, Charlie

En este capítulo empezó lo bueno de la tercera temporada. Después de esto, un sinfín de capítulos geniales que nos llevaron en volandas a la finale de la tercera temporada sin poder cerrar la boca.

Y eso que fue el primer capítulo “sin isla”. Bueno, sí que hubo isla, pero poco. Lo justo para meternos en escena. Desmond se puso a correr como loco por la selva, se tiró al mar, se puso a nadar como un poseso y salvó a Claire de una muerte segura. Ya antes la había salvado de electrocutarse cuando se ofreció a arreglarle el tejado. Como Charlie apareció por ahí de chulo, pues Desmond tuvo que ingeniárselas para diseñar un pararrayos isleño.

El caso es que todos dijimos lo que ya sabíamos: “este tío ve el futuro”. Eso ya lo sabíamos nosotros, pero Charlie lo acababa de averiguar y decidió, junto con Hurley, emborrachar al muchas-veces-ebrio escocés para sacarle la verdad. En plena borrachera Charlie le llamó cobarde por no querer contar la verdad y Desmond se tiró a por él.

Y de ahí pasamos a un capítulo genial de Desmond despertándse en su piso sin saber que había pasado. En una combinación de flashback y de producto de su mente, Desmond nos cuenta la historia triste con su suegro y después nos adentramos con él en el mundo de la predicción del futuro. La vieja de ‘los Otros’ (la película) le dice que no podrá salvar eternamente a la gente que ve morir porque el universo es muy listo y pone las cosas en su sitio.

Todos pensamos que Claire iba a morir. Y Charlie también, hasta que Desmond, de vuelta en la isla, le dice:

- Te estaba salvando a ti, Charlie. Cuando caía el rayo, te electrocutaste. Cuando Claire estaba en el agua, te ahogabas intentando salvarla. No importa lo que haga, porque vas a morir, Charlie.

4. Michael mata a Ana Lucía y a Libby (2×20)

Este capítulo tiene el final más cruel de la serie. Al menos, a mí me lo parece. Es de esos capítulos que te hacen recordar de un sopapo que ‘Lost’ es una serie dramática.

Ana Lucía se las ingenia para quedarse a solas en la escotilla con Henry Gale (que ya sabíamos que no era Henry Gale). Iba a matarle. Pero en el último momento no pudo. Entonces apareció Michael que pasaba por allí y le dijo que le diera el arma. “Yo lo haré. Son animales, se llevaron a mi hijo. Yo le mataré”.

Ana Lucía le cedió a Michael el arma y éste, mirándola, dijo:

“- I´m sorry.
- For what?”

Y Michael le metió un tiro en el pecho. Luego llegó Libby que iba por mantas a la escotilla para tener una cenita romántica con Hurley, Michael se asustó y le disparó también. Ya, con la tranquilidad reinando in the hatch, Michael abrió la puerta del pequeño habitáculo donde estaba Henry Gale, que se levantó pensando que iba a morir.

Michael le miró, levantó su arma, se apuntó al brazo (vimos a la primera que el corazón no quedaba en ese ángulo) y se disparó.

Pantalla en negro.

El momento más cruel de toda la serie.

3. Ethan Rom (1×10)

Reconozcámoslo. No nos creíamos del todo las palabras de la francesa diciendo que había otros en la isla porque les oía susurrar. Esa tía llevaba 16 años en la isla sola y tenía pinta de estar como una cabra. Pero entonces, ¿quién pegó a Sayid con un palo? Bah, yo qué sé, pero me parece raro que haya otros, pensábamos.

Además, Ethan había salido en un par de capítulos anteriores haciendo vida isleña con los losties y, quitando que era un tío con la cara un poco rara, no parecía malvado. Pero alguien se entretuvo en atacar al bebé de Claire (ojito a la pesadilla del principio del capítulo) y Hurley comenzó a censar a los supervivientes (creo que a pocos se nos hubiera ocurrido esto).

Dejemos a Hurley a un lado. Pasemos al flashback de Claire. El típico novio egoísta que pasa de ella y la deja embarazada y sola. Una amiga suya le convence para ir a ver a un vidente y éste adivina que se ha quedado sola a las primeras de cambio (¡ojo!). De repente, aparta sus manos de él y pide que se vayan.

En otra sesión, le cuenta lo que vio. El bebé está rodeado de maldad y Claire debe cuidarlo ella sola para que no salga de ahí el anticristo (hipérbole). Claire le rehuye y le comunica que lo va a dar en adopción. Pero no puede firmar (¿señal?). Vuelve al vidente que le había estado llamando pidiendo que le escuchara porque había dado con una solución: dar al bebé en adopción a dos personas de Los Ángeles.

¿Sabía el vidente que el avión no llegaría a Los Ángeles? ¿Era el vidente un mentiroso sobornado para que mandara a Claire al avión? ¿Por qué el bebé iba a ser el anticristo?

Pero estas preguntas quedan en el aire porque Hurley hace su aparición estelar y dice que Ethan no iba en el avión, no estaba en la lista de pasajeros.

Y Ethan, que había sido mandado por Charlie para ir a buscar a Jack, sale al encuentro de Charlie y Claire con cara de malo.

2. We have to go back! (3×23)

Empezaba la ansiada finale de la tercera temporada con otro flashback de Jack. ¿Otro? Sí. ¿Pero cuántos iban ya? Muchos. ¿Y otro más? Sí. Pero bueno, Sayid se había quedado atrás con Jin y Bernard, los nuestros iban a la torre de radio, Charlie estaba solo ante el peligro en la estación Dharma… había muchas cosas para sobrevivir a un flashback de Jack.

Y el tío, dado a la bebida en pleno vuelo de Oceanic (mooola), lee algo en el periódico. Hace un recorte y se lo guarda. A mitad de camino a su casa (suponemos), para el coche y llama a un número que no conocemos (claro, solamente oímos el tin tin del teléfono). Pero no hay nadie, así que Jack dice cuatro cosas y cuelga sin acabar de hablar, llorando como una magdalena, sale de su vehículo, se sube a un puente dispuesto a suicidarse (¿qué le pasa a Jack?) y, de repente, un coche se estrella a sus espaldas y tiene que proseguir con su labor de héroe.

Todo esto con música de fondo tierna. La misma música que toca en el piano en el 3×13, creo.

Luego veríamos a la ex mujer de Jack embarazada. Descubriríamos que Jack está enganchado a la oxicodona. Nos daríamos cuenta de que el recorte de periódico era de alguien que había muerto pero no sabemos quien… Incluso Jack le dice a un médico que vaya a buscar a su padre que seguro que está más borracho que él.

Y nada, llegamos al final del capítulo y por fin Jack consigue contactar con la persona a la que no para de llamar en todo el capítulo. “Quedamos donde siempre“, le dice. Y se va al aeropuerto. Y todos estamos expectantes de ver quién será esa persona. Una cosa está clara, la ex mujer no va a ser.

Y llega un coche, mientras todos esperamos. Jack baja del suyo, se abre la puerta del otro, sale alguien, se acerca y… es Kate! Kate Austen! Nuestra Kate! ¿Se conocían de antes?

Y todo lo demás lo dejo puesto en forma de vídeo, creación propia.

Y 8 meses de parón.

1. Waaaaaaaaalt! (1×25)

Supe ya en los comienzos de esta clasificación que el final no iba a agradar a todo el mundo. Pero esa es la gracia del ser humano, que no somos todos iguales. Y, para mí, este es el mejor cliffhanger hasta la fecha. Sé que no fue tan espectacular como la finale de la tercera temporada (con la muerte de Charlie y el flashforward), pero esta finale le supera. O esa es mi opinión.

En este capítulo teníamos a Charlie corriendo por la selva con Sayid en busca de Aaron (acababamos de conocer su nombre, awwwww), porque Rousseau se lo había llevado. Por otro lado, Arzt acababa de explotar en pedazos por ir de guay con la dinamita. Y, por si fuera poco, Sawyer, Jin, Michael y Walt iban en la balsa camino a la libertad (o a la inanición).

Sayid y Charlie recuperaron el bebé. Bien.

Locke, Jack y Kate vieron el humo negro. Locke tuvo uno de sus ataques ‘déjame con mi isla’. Bien.

No, no tan bien. Los 4 supervivientes de la aventura (Hurley y los tres mencionados arriba) tenían todo preparado para volar la escotila. ¡Por fin! ¡Toda una temporada para ello! “Hurley, corre, vente pa acá que vas a explotar tu también por los aires“, le dijeron a Hurley, a grosso modo. Y este, torpón él, dejo caer la linterna sobre la escotilla. ¿Y qué vio? Sus malditos números. Allí estaban. Los que le habían arruinado la vida. Algo malo iba a salir de aquella escotilla. Algo diabólico.

- ¡No lo prendas! ¡No podemos hacerlo!

Locke dijo que ni hablar y prendió la mecha porque, para Locke, la isla es su isla y hace lo que le da la gana. Hurley no pudo apagarla y la escotilla saltó por los aires.

Mientras tanto, los de la balsa recibieron algo por el radar que Sayid hizo. Sayid debería ganarse el pan como presentador de Bricomanía. Todos presionaban a Michael para que lanzara la bengala. Este se resistía a hacerlo porque sólo tenían una y podía ser un madero que flotara. Pero este supuesto madero giró y Michael no tuvo más remedio que lanzar la bengala.

Unos segundos después, un foco alumbraba la balsa. Habían encontrado a alguien. Los losties, nuestros losties, habían encontrado un rescate. Los de la balsa, majos ellos, se contagiaron de la emoción de Sawyer y compañía. “Un accidente aéreo, ¿qué me dices? Tenéis suerte de que os hallamos encontrado”.

Todos felices hasta que la música cambió de tono. Chanquete dijo una de las frases más recordadas de Lost.

“Tenemos que llevarnos al muchacho”.

¿¿¿Cómo??? (esto fuimos nosotros. También los losties, sí, pero también nosotros).

“El muchacho, nos lo tenemos que llevar”.

“No voy a daros a nadie”.

“Como quieras…”

Y apagaron el foco, dispararon a Sawyer que cayó al mar, Jin se tiró tras él, cogieron a Walt, pegaron a Michael que cayó al agua y volaron la balsa. Walt era capturado al son del grito de su padre:

“WAAAAAAAAAAAAAAAAALT!!!”

Y después de un recordatorio de como los losties embarcaron (la mar de bonito), nos llevan de nuevo a la isla para ver lo que hay en la escotilla. Pero los muy… listos de los creadores de ‘Lost’ nos iban a dejar con la miel en los labios: vemos a Locke y Jack asomarse a un hueco enorme donde hay una escalera (rota).

gracias a estele por esta última parte